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METODOLOGÍAS Y HERRAMIENTAS

Presentamos a continuación, y solo a manera de ilustración (dado que solo se trata de una muestra general, y no de materiales ya terminados) algunos ejemplos (se podrían crear otros a medida que el programa se desarrolle) de las metodologías de las que haría uso en el programa MOMENTOS PARA SER.

Puesto que se trata solo de una muestra, se ofrece aquí solo una explicación breve de cada metodología, mientras que en los anexos se presentan algunos ejemplos (en borrador) de algunas de tales metodologías.

Enigmas lógicos

Se trata de situaciones (que se pueden recrear cultural y literariamente) en las que se pide a una persona que resuelva un problema -partiendo de una información muy básica que se le ofrece y que él debe examinar cuidadosamente y relacionar de forma enteramente lógica- en orden a construir la respuesta siguiendo un razonamiento estrictamente lógico. Para lograr esto, debe saber hacer inferencias lógicas correctas a partir de un punto de partida que permita hacer tales inferencias y, sobre todo, elaborar una estrategia mental propia para la resolución del problema.

Hay enigmas lógicos para muy diversas edades, que se pueden conseguir en Internet, en libros de lógica y en alguna revista especializada sobre el tema. Se recomienda especialmente utilizar, adaptándolos culturalmente, los elaborados por Raymond Smullyan (ver anexo 1).

Dilemas éticos

Se trata de presentar una situación, que sea lo más verosímil posible (en el sentido de que podría ocurrirle a aquel a quien se propone el dilema), en donde este se vea enfrentado a dos posibles respuestas y en donde debe optar necesariamente por una de ellas a partir de una argumentación que justifique por qué considera preferible la decisión tomada en un conjunto de circunstancias específicas. Desde luego, dicha argumentación puede ser discutida e iluminada desde otras perspectivas. Aquí no basta con argumentar de forma correcta, sino que es preciso justificar con buenas razones la posición adoptada y, en lo posible, convencer a otros de que se trata de la mejor decisión posible en determinadas circunstancias.

Hay dilemas éticos muy diversos, apropiados para cada edad y nivel educativo, y la resolución y justificación de cada dilema permite que los participantes puedan clarificar sus conceptos y posiciones éticas. Hay juegos como “Cuestión de escrúpulos” (que tiene diversas versiones) que ofrecen muchos casos y proponen incluso una metodología para trabajar con ellos (ver anexo 2).

Entrevistas

Se pueden entender en un sentido muy general -como la reunión entre dos o más personas para examinar un asunto- o en el sentido específico de una conversación entre dos personas, una de las cuales hace preguntas y otra (ordinariamente alguien que tiene un buen conocimiento de un tema) ofrece sus respuestas y opiniones ante dichas preguntas.

De las dos maneras podría utilizarse la entrevista como herramienta educativa. Se puede proponer, por ejemplo, a un grupo de personas (no mayor de cuatro o cinco) que se reúnan y que hagan una propuesta para hacer algo o resolver un problema. Se podría también utilizar el modelo de la entrevista a alguien de quien queremos conocer sus opiniones (allí caben desde artistas y personajes públicos hasta los propios padres de familia y profesores).

Lo esencial al utilizar esta estrategia metodológica es que los invitados realmente puedan interesar a los estudiantes y que dicha entrevista se prepare adecuadamente por los estudiantes con el apoyo permanente del profesor, pues una entrevista no es una conversación informal, sino que supone una estrategia para preguntar al invitado y para explorar sus deseos, gustos, opiniones y modos de ver las cosas.

No se ofrecen aquí ejemplos, porque el tipo de entrevistas que se hagan dependerá mucho de los intereses de los estudiantes y maestros implicados, aunque de todos modos se pueden mirar como modelo muchos libros de entrevistas famosos.

Hojas de valores

Se trata de elaborar textos escritos cortos en donde una persona declara y justifica por qué una determinada cosa (un concepto, una actividad, un sentimiento, etc.) representan para él algo importante, valioso y significativo para su vida personal.

Para que ello sea posible, en ocasiones se parte de algunos modelos (por ejemplo, textos cortos de un gran pensador o escritor, pasajes de un discurso muy conocido en donde alguien expresa lo que para él es algo valioso, etc.) y, en otras ocasiones, simplemente se plantea a los participantes una pregunta o situación sencilla (del estilo “di cuáles son las tres cosas más importantes en tu vida”, “recuerda tres momentos en que te hayas sentido muy feliz”) como punto de partida para su escrito.

Aquí es importante que los participantes no solo escriban un pequeño texto, sino que lo compartan con otros dentro de un ambiente de escucha y máximo respeto entre los participantes.

En algunos casos, especialmente cuando se trabaje con alumnos mayores, estas “hojas de valores” podrían ser el punto de partida para una discusión animada en donde se contrapongan perspectivas (esto, sin embargo, no parece muy conveniente cuando se trate con alumnos menores). (Ver anexo 3).

Narraciones

Dentro de esta categoría caben muy diversos tipos de relatos: desde textos autobiográficos hasta cuentos, narraciones en verso de una cierta situación e incluso relatos míticos o crónicas de un acontecimiento, pasajes tomados de una novela y testimonios de un descubrimiento (científico, geográfico, espiritual, etc.). Lo esencial es que se trate de una lectura motivada en la cual hay una intención de llevar a los estudiantes a pensar en un cierto tema; por ejemplo: el sentido de la justicia, el amor a los animales, el compromiso con el medio ambiente, la belleza de la naturaleza.

Lo importante es que sean relatos cortos y que se pueda hacer de ellos una lectura pública y compartida, de tal manera que estudiantes y profesores tengan espacio para comentar las impresiones y pensamientos que les suscitan. No se trata solo de “leer historias”, sino de hacerlo junto con otros. El ejercicio de la lectura compartida es esencial en la creación de una comunidad y no debería dejar de practicarse en los diversos procesos educativos.

Los modelos habría que buscarlos aquí de acuerdo con el tema que se quiere tratar. Veamos algunos ejemplos posibles:

  • Para hablar del sentido de la democracia, “El discurso de Gettysburg”, de Abraham Lincoln.
  • Para examinar el significado de la justicia, “El juez hábil de Tolstoi”.
  • Para apreciar el valor de las matemáticas, algún pasaje de “El hombre que calculaba”, de Malba Tahan.
  • Para hablar de la relación del hombre con los animales, el poema de Rubén Darío “Los motivos del lobo”.

Para reflexionar sobre el sentido del lenguaje, la visita a la Academia de Lagado en Los viajes de Gulliver, de Jonathan Swift.

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Historias inspiradoras

Estas “historias inspiradoras” no son un relato cualquiera. Deben tener un carácter que impresione, más que por lo heroicas que puedan ser, porque pueden dar cuenta de la grandeza del espíritu humano y porque a menudo son ejemplos muy vivos de perseverancia, capacidad de sacrificio y, en general, de virtudes morales que todos apreciamos: la valentía, la templanza, la generosidad, la prudencia política, etc.

Como en el caso anterior, habrá que garantizar que esas historias no sean largas. Para ello, si bien siempre es deseable (cuando es posible) leer la historia relatada por el propio protagonista, en algunos casos se podrá hacer un breve resumen de la historia, de tal manera que no resulte muy larga y, sobre todo, que sea fácilmente comprensible para los estudiantes que la leen.

Hay historias inspiradoras en muy diversos campos: en el deporte, la política, el arte, la ciencia, etc. Además, las hay también en diversos formatos: en libros, en videos, en podcasts, etc.

Algunos ejemplos de tales historias podrían ser estos:

  • “Cristian, el león (reencuentro)” (video de YouTube).
  • “El hombre que frenó el desierto” (video de YouTube).
  • “Jesse Owens y Luz Long, amistad por encima del odio” (video de YouTube).
  • “El diario de Ana Frank” (algún pasaje selecto).
  • La historia de Maximiliano Kolbe (el santo polaco que ofrendó su vida por otro en un campo de concentración nazi).

Ejercicios de observación y contemplación

Se trata de algunos ejercicios sencillos que, bajo la guía de un profesor, pueden hacer los estudiantes (individualmente o en grupos), preferiblemente en espacios abiertos (un bosque, un lago, una montaña), y que bien pueden tener un carácter investigativo (si se trata de ejercicios de observación) o de recreación estética y espiritual (que son propiamente los ejercicios de carácter contemplativo).

La metodología de estos ejercicios, desde luego, habrá de ser pensada en cada caso específico dependiendo del ejercicio que se pretende hacer, de la relación que este tenga con ciertos contenidos escolares y, sobre todo, con las características y condiciones del espacio físico en que se realizan.

Solo a manera de ejemplo, se podrían hacer ejercicios de observación como los siguientes:

  • Hacer un registro de los pájaros que hay en un bosque (apoyándolo con la toma de fotografías en un celular) y establecer semejanzas y diferencias entre ellos.
  • Hacer un conteo del número y tipo de almacenes que se encuentran en un segmento de la ciudad (por ejemplo, tres cuadras) y, a partir de ello, elaborar tres hipótesis sobre la situación económica actual del país.
  • Reunir cuatro fotografías (si es posible de una misma persona) y observar y describir los rasgos característicos de diversos estados anímicos (tristeza, alegría, dolor, preocupación, etc.).

Algunos ejemplos de ejercicios de contemplación podrían ser estos:

  • Sentarse junto a una cascada y escuchar, en absoluto silencio y por un espacio de cinco minutos, la caída del agua. Relatar luego, en un escrito de 150 palabras, el mensaje que nos transmitió la escucha del agua.
  • Ver un atardecer de forma sostenida al menos por quince minutos e intentar describirlo de la forma más bella posible (atendiendo a todas las sensaciones de color, sonido, olor, sabor, textura).
  • Contemplar un cuadro famoso y hacer una descripción lo más detallada posible de él en donde se combine la descripción de los rasgos físicos observados con la manifestación de las impresiones y sensaciones que dicha observación suscita.

Planteamiento de retos

Es una metodología completamente activa, dado que no se propone una estrategia a seguir (como en muchas de las anteriores actividades), sino que se plantea una dificultad, a manera de un reto o desafío, a los estudiantes y estos deben encontrar alternativas de solución a la dificultad planteada.

Dicho reto puede consistir en tomar una decisión pronta en una situación apremiante o incluso en idear un plan, junto con otros, para resolver una dificultad o problema. Lo importante, en el primer caso, está en saber encontrar las alternativas adecuadas y oportunas en un momento difícil; en el segundo, lo esencial es la posibilidad de planificar una solución junto con otros.

Algunos ejemplos posibles de retos que se podrían plantear serían los siguientes:

  • Una comunidad campesina, a raíz de un problema técnico que no se podrá solucionar en el corto plazo, se queda sin suministro de agua por quince días. ¿Cómo solucionar dicha emergencia?
  • En una isla habitada por comunidades raizales y situada a miles de kilómetros del territorio continental del país al que pertenece se presenta un ciclón que la destruye. ¿Cómo debe la comunidad enfrentar la emergencia para que el caos no sea mayor?
  • Un alumno, apoyado en personas externas al colegio y con antecedentes delincuenciales, tiene amenazado a un profesor del colegio. Otro alumno se ha enterado de ello y reúne a algunos compañeros para hacer un plan de defensa del profesor. ¿En qué debería consistir dicho plan?

Historias inspiradoras

Estas “historias inspiradoras” no son un relato cualquiera. Deben tener un carácter que impresione, más que por lo heroicas que puedan ser, porque pueden dar cuenta de la grandeza del espíritu humano y porque a menudo son ejemplos muy vivos de perseverancia, capacidad de sacrificio y, en general, de virtudes morales que todos apreciamos: la valentía, la templanza, la generosidad, la prudencia política, etc.

Como en el caso anterior, habrá que garantizar que esas historias no sean largas. Para ello, si bien siempre es deseable (cuando es posible) leer la historia relatada por el propio protagonista, en algunos casos se podrá hacer un breve resumen de la historia, de tal manera que no resulte muy larga y, sobre todo, que sea fácilmente comprensible para los estudiantes que la leen.

Hay historias inspiradoras en muy diversos campos: en el deporte, la política, el arte, la ciencia, etc. Además, las hay también en diversos formatos: en libros, en videos, en podcasts, etc.

Algunos ejemplos de tales historias podrían ser estos:

  • “Cristian, el león (reencuentro)” (video de YouTube).
  • “El hombre que frenó el desierto” (video de YouTube).
  • “Jesse Owens y Luz Long, amistad por encima del odio” (video de YouTube).
  • “El diario de Ana Frank” (algún pasaje selecto).
  • La historia de Maximiliano Kolbe (el santo polaco que ofrendó su vida por otro en un campo de concentración nazi).

Ejercicios de observación y contemplación

Se trata de algunos ejercicios sencillos que, bajo la guía de un profesor, pueden hacer los estudiantes (individualmente o en grupos), preferiblemente en espacios abiertos (un bosque, un lago, una montaña), y que bien pueden tener un carácter investigativo (si se trata de ejercicios de observación) o de recreación estética y espiritual (que son propiamente los ejercicios de carácter contemplativo).

La metodología de estos ejercicios, desde luego, habrá de ser pensada en cada caso específico dependiendo del ejercicio que se pretende hacer, de la relación que este tenga con ciertos contenidos escolares y, sobre todo, con las características y condiciones del espacio físico en que se realizan.

Solo a manera de ejemplo, se podrían hacer ejercicios de observación como los siguientes:

  • Hacer un registro de los pájaros que hay en un bosque (apoyándolo con la toma de fotografías en un celular) y establecer semejanzas y diferencias entre ellos.
  • Hacer un conteo del número y tipo de almacenes que se encuentran en un segmento de la ciudad (por ejemplo, tres cuadras) y, a partir de ello, elaborar tres hipótesis sobre la situación económica actual del país.
  • Reunir cuatro fotografías (si es posible de una misma persona) y observar y describir los rasgos característicos de diversos estados anímicos (tristeza, alegría, dolor, preocupación, etc.).

Algunos ejemplos de ejercicios de contemplación podrían ser estos:

  • Sentarse junto a una cascada y escuchar, en absoluto silencio y por un espacio de cinco minutos, la caída del agua. Relatar luego, en un escrito de 150 palabras, el mensaje que nos transmitió la escucha del agua.
  • Ver un atardecer de forma sostenida al menos por quince minutos e intentar describirlo de la forma más bella posible (atendiendo a todas las sensaciones de color, sonido, olor, sabor, textura).
  • Contemplar un cuadro famoso y hacer una descripción lo más detallada posible de él en donde se combine la descripción de los rasgos físicos observados con la manifestación de las impresiones y sensaciones que dicha observación suscita.

Planteamiento de retos

Es una metodología completamente activa, dado que no se propone una estrategia a seguir (como en muchas de las anteriores actividades), sino que se plantea una dificultad, a manera de un reto o desafío, a los estudiantes y estos deben encontrar alternativas de solución a la dificultad planteada.

Dicho reto puede consistir en tomar una decisión pronta en una situación apremiante o incluso en idear un plan, junto con otros, para resolver una dificultad o problema. Lo importante, en el primer caso, está en saber encontrar las alternativas adecuadas y oportunas en un momento difícil; en el segundo, lo esencial es la posibilidad de planificar una solución junto con otros.

Algunos ejemplos posibles de retos que se podrían plantear serían los siguientes:

  • Una comunidad campesina, a raíz de un problema técnico que no se podrá solucionar en el corto plazo, se queda sin suministro de agua por quince días. ¿Cómo solucionar dicha emergencia?
  • En una isla habitada por comunidades raizales y situada a miles de kilómetros del territorio continental del país al que pertenece se presenta un ciclón que la destruye. ¿Cómo debe la comunidad enfrentar la emergencia para que el caos no sea mayor?
  • Un alumno, apoyado en personas externas al colegio y con antecedentes delincuenciales, tiene amenazado a un profesor del colegio. Otro alumno se ha enterado de ello y reúne a algunos compañeros para hacer un plan de defensa del profesor. ¿En qué debería consistir dicho plan?

Anexo 1: Enigmas lógicos

El caso de la mula de Hassán

Una vez Hassán se encontró con tres niños y les contó acerca de su mula.

  • ¿De qué color es? -le preguntó uno de ellos.
  • Bien -respondió Hassán-, juguemos un poco a las adivinanzas. Les diré que es o bien marrón, o negra, o gris. ¿Por qué no tratan de hacer algunas suposiciones y, cuando tengamos suficientes, les diré algo sobre ellas, y luego veremos si pueden deducir el color?
  • Yo supongo que no es negra -dijo uno de ellos.
  • Yo supongo que es marrón o gris -dijo otro.
  • Yo supongo que es marrón -dijo el tercero.
  • ¡Basta! -dijo Hassán-. Ya tenemos suficientes suposiciones. Sucede que al menos uno de ustedes ha acertado, y al menos uno de ustedes no ha acertado.

¿De qué color es la mula de Hassán?

La historia de Abdul el joyero

  • Una noche un ladrón robó en la tienda de Abdul.
  • ¡Debería haber sido ahogado y descuartizado! -interrumpió el rey.
  • Es verdad, Vuestra Majestad -replicó Scherezade-, pero, continuando con mi historia, lo cierto es que el ladrón, para su gran alegría, se encontró con una pila de diamantes. Primero pensó en llevárselos todos; sin embargo, al cabo de un rato, su conciencia comenzó a molestarle, y decidió contentarse con tan sólo la mitad.
  • ¡Vaya! -murmuró el rey.
  • Entonces tomó la mitad de los diamantes y se dispuso a dejar la tienda.
  • ¡Ajá! -dijo el monarca.
  • Pero luego lo pensó mejor. “Tomaré uno más”, y así lo hizo.
  • ¡Jolín! -exclamó el rey.
  • Y, de esta manera, abandonó la tienda, habiendo robado la mitad más uno de los diamantes.
  • ¿Y qué pasó luego? -preguntó el rey.
  • Lo que es bastante extraño, unos minutos más tarde entró un segundo ladrón a la tienda, y tomó la mitad más uno del resto de los diamantes. Luego entró un tercer ladrón, y tomó la mitad más uno de los diamantes restantes. Después entró un cuarto ladrón y tomó la mitad más uno del resto. Por último, entró un quinto ladrón a la tienda, pero no se llevó ningún diamante, ya que no quedaba ninguno.
  • Entonces, ¿cuál es el problema? -preguntó el rey.
  • El problema, Majestad -dijo ella- es el siguiente. ¿Cuántos diamantes había inicialmente en la pila?
  • ¿Cómo habría de saberlo?
  • No es tan difícil de resolver -contestó Scherezade.

¿Cuántos diamantes había al comienzo en la pila?

Las amigas que estudiaban botánica

Había tres compañeras que se habían puesto de acuerdo para estudiar juntas. Sin embargo, no se pudieron reunir y, al final, cada una tuvo que estudiar por su cuenta. A cada una le tocaba estudiar sobre un árbol diferente, y cada una estudió en un lugar distinto.

Lo que sabemos es muy poco. Solamente lo siguiente:

  1. La muchacha de apellido Pérez estuvo estudiando acerca del eucalipto.
  2. Blanca estudió en el bus cuando iba para el colegio.
  3. A la que estaba estudiando el roble le ayudaron en la biblioteca pública.
  4. Lo que estaba estudiando Fanny no era sobre el pino.
  5. La que estudió en la casa no fue Ana Torres.
  6. Había una de apellido González.

¿Podrías decirnos el nombre y el apellido de cada una de ellas, además del lugar en donde estudiaron y el árbol sobre el que tuvo que estudiar cada una?

Anexo 2: Dilemas éticos

Dilema 1: La eutanasia

Sebastián Paniagua es un señor de 65 años que padece un cáncer incurable. Aún no ha llegado a su fase terminal, pero esta promete ser bastante aguda y dolorosa. En cualquier caso, se encuentra completamente desahuciado. La esperanza máxima de vida que le han señalado los médicos es de 4 a 6 meses.

Sus dos hijos son profesionales y su mujer podrá vivir de su pensión una vez muera él. El tratamiento al que se ha debido someter ha resultado sumamente costoso y él y su familia han incurrido en deudas importantes. Por ahora las deudas parecen pagables y sus hijos le han prometido encargarse de ellas. Sin embargo, si las deudas siguen aumentando de esa forma, podría ponerse en peligro su casa, que es lo único que podría dejar a su familia.

En este momento conserva aún plena su conciencia, pero es muy posible que el avance de la enfermedad empiece pronto a afectarla. Ante la situación, y dado que ya vive una vida muy artificial (se le suministran diariamente muchas drogas, se le alimenta por sonda y debe permanecer atado a dos o tres aparatos diferentes), él ha solicitado a los médicos que le suspendan la medicación -exceptuando solo aquella que le ayuda a soportar el dolor-, que lo desconecten de los aparatos y que lo dejen morir en paz, pues para él no tiene ningún sentido continuar viviendo de esa forma.

El médico que lo está atendiendo dice que él está impedido para hacer eso, pero que, si él, su mujer y sus hijos están decididos a hacerlo, deben comprometerse mediante un papel firmado a suspender el tratamiento.

  • ¿Tiene derecho Sebastián a pedir que le suspendan el tratamiento y lo dejen morir en paz?
  • ¿Tienen la mujer y los hijos derecho a decidir sobre la vida de Sebastián, así sea contando con su consentimiento?
  • ¿Estaría el médico en condiciones de “ayudar a morir bien” al paciente?

Dilema 2: El aborto

Hernán y Patricia llevan quince años de casados y tienen dos hijos con quienes mantienen una relación muy cordial y cercana. Han acordado no tener más hijos, pues ni los desean ni creen que sus condiciones, tanto emocionales como económicas, les permitan ofrecerle una buena formación a un tercer hijo. Patricia, ahora que sus hijos ya no le exigen tanto tiempo, quiere volver a estudiar, mientras que Hernán se propone sacar adelante nuevos proyectos profesionales.  Por otra parte, ese acuerdo es explícito y se lo han comunicado a sus dos hijos: Gerardo, de 13 años, y Camila, de 12 años. Además, llevan ya varios años planificando para evitar el tener más hijos.

Sin embargo, y sin que ellos le encuentren una explicación clara al asunto, Patricia ha resultado embarazada. Conversa con su esposo sobre el punto y deciden practicarse un aborto, pues, según ellos, el criar un nuevo hijo no lo ven viable en este momento, no lo consideran un hijo deseado y, además, les implicaría renunciar a los proyectos que tienen en mente y dedicarles menos tiempo a los dos hijos que el que hasta ahora le han dedicado. Consultan con un médico y este realiza el aborto. Sus hijos -y tampoco ninguno de sus familiares o amigos- se enteran de ello.

  • ¿Consideran legítima la decisión de esta pareja?, ¿son suficientes sus razones?
  • ¿Podría justificarse éticamente de alguna forma una decisión de este tipo?
  • Aparte de que el aborto sea ilegal en nuestro país, ¿creen ustedes que ello necesariamente es una decisión inmoral? Justifiquen su respuesta.

Anexo 3: La hoja de valores

Lee el siguiente texto, tomado de la Autobiografía del filósofo, matemático y escritor inglés Bertrand Russell (1872-1970), Premio Nobel de Literatura en 1952 y uno de los más conocidos pacifistas del siglo XX. Para comenzar, indica, subrayándolo en el texto, qué te gusta y qué no te gusta de él. A continuación, realiza las actividades que se te proponen al final de la lectura. Finalmente, coméntalo y discútelo con tus compañeros.

Para lo que he vivido (Bertrand Russell)

Tres pasiones -sencillas, pero tremendamente fuertes- han regido mi vida: el deseo de amar y ser amado, la búsqueda del saber y una compasión, superior a mis fuerzas, por el sufrimiento de la humanidad. Estas pasiones, como vientos potentes, me han zarandeado de aquí para allá, en navegación tortuosa, por el océano profundo de la angustia, hasta el borde mismo de la desesperación.

Busqué primero el amor, porque trae consigo el éxtasis -éxtasis tan grande que muchas veces hubiera sacrificado yo el resto de mi vida por unas pocas horas de su gozo-. Lo busqué, también, porque el amor alivia la soledad -esa terrible soledad en la que el tembloroso ser que tiene conciencia de sí mismo se asoma al borde del universo y ve un frío abismo sin fondo y sin vida-. Y lo busqué, finalmente, porque en la unión que es amor he visto, como en mística miniatura, la visión anunciadora de ese cielo que los santos y los poetas han imaginado. Eso es lo que busqué y, aunque parezca quizá demasiado gozo para el hombre, eso es lo que -al fin- he encontrado.

Con el mismo apasionamiento busqué el saber. He deseado comprender el corazón del hombre. He querido saber por qué brillan las estrellas. Y he intentado apoderarme del poder pitagórico gracias al cual el número triunfa sobre el flujo. Algo de esto, aunque no mucho, he conseguido.

El amor y el saber, en cuanto me fueron posibles, me levantaron hacia arriba, hacia los cielos. Pero la compasión me devolvió siempre a la tierra. Ecos de gritos de dolor reverberan en mi corazón. Niños hambrientos, víctimas torturadas por opresores, ancianos inválidos que son solo una carga odiada para sus hijos, y todo ese mundo de soledad, pobreza y sufrimiento convierte en burla lo que la vida humana debería ser. Aspiro con toda mi alma a aliviar el mal, pero no puedo, y sufro.

Esta ha sido mi vida. La juzgo digna de vivirse y, si se me diera la oportunidad, volvería a vivirla con gusto.

Para que elabores personalmente (por escrito) y luego compartas con tus compañeros

  1. ¿Crees que tener claro aquello a lo que uno quiere dedicarle su vida le ayuda a no cometer errores inútiles? Discútelo con tus compañeros.
  2. Intenta pensar en tres errores que has cometido a lo largo de tu vida. Descríbelos de forma precisa y explica por qué los consideras errores. Plantéate ahora esta pregunta: ¿Aprendiste algo de esos errores? ¿Qué? ¿En qué te ayudaron a crecer como persona?
  3. ¿Podrías identificar, como lo hace Russell en el texto que acabas de leer, las tres “pasiones” que guían tu vida? Elígelas, descríbelas y explícalas. Con ello redacta un texto de dos páginas para compartir con tus compañeros.